miércoles, 28 de marzo de 2012

Que siempre no son más de 60 mil



Un lector me ha sacado de mi error. Que no son más de 60 mil muertos los que lleva Calderón en su sexenio. No señor. Que eso lo decimos los periodistas irresponsables de tal manera como si el gobierno los hubiera matado, cuando el 90% (o más) es resultado del ajuste de cuentas entre criminales, sin que el gobierno haya intervenido matándolos.

Ojo, ahí no acaba la disertación.

Que otro porcentaje grande murió, continúa el lector, cuando los criminales estaban atacando al ejército, y en un porcentaje mucho menor, fueron negligencias, asesinatos y ejecuciones en las que participó el gobierno, por así decirlo.

Y aquí sale el peine.

El lector me dice que Héctor Aguilar Camín menciona en su columna de Milenio (Los muertos de Calderón, 2012-01-16) que “la abrumadora mayoría de las muertes violentas registradas en estos años no son fruto de la acción represiva del gobierno, sino de la espiral homicida de las bandas criminales. La cifra completa de homicidios vinculada al crimen organizado corresponde precisamente a ejecuciones hechas por esas bandas, no por el gobierno. Según la PGR, entre enero y septiembre de 2011 esos homicidios fueron 12 mil 903. Sumados a los registros de 2007 a 2010, dan la cifra que los medios redondean en Los 50 mil muertos de la guerra de Calderón. La fórmula debería ser, en rigor, los 47,515 homicidios realizados por las bandas criminales durante el sexenio de Calderón”.

No cabe duda que cuando te aporrean en la cara cifras, datos, estadísticas y porcentajes, uno se queda de piedra. Incluso piensas, caramba, que inteligente es el señor Aguilar Camín. Con razón los lectores me reclaman que los estoy desinformando. Lástima que todas esas cifras tan frías provengan, primero que nada, de un gobierno que realizó un fraude (probado) para hacerse de la presidencia; segundo, mismo gobierno que no tiene empacho en montar espectáculos mediáticos ante las cámaras de Televisa, amañando pruebas y torciendo la ley, todo sea en pos de castigar a los “criminales” (véase el caso Florance Cassez).

Existe algo que se llama sentido común, y eso es más fuerte que cualquier cifra. Cuando eres el hombre más poderoso del país y decides invertir multimillonarias cantidades del presupuesto nacional en una guerra estúpida e inútil (y además cacarearla con orgullo) en vez de en educación, cultura, ciencia y tecnología, entonces tú y tu partido son culpables de todas y cada una de las muertes, sean directas o indirectas.

2 comentarios:

F dijo...

Tanto dinero invertido en algo tan vacio, y mientras ver vitorear con aplausos en discursos "hemos invertido(la palabra inversion en esta oracion es insultante) 50 000 000 en la lucha contra la delincuencia" cuando los verdaderos delincuentes se encuentran postrados en un cuadro similar a la ultima cena en los cubiles del PAN confabulando,(no solo ellos sino todos los demas cubiles) contra la sociedad

pena y ajena ademas

SDPnoticias.com dijo...

Publicado en:

http://www.sdpnoticias.com/columna/8398/Que_siempre_no_son_mas_de_60_mil